POESÍA DE ENRIQUE ALCALÁ ORTIZ - Cantos al Priego de la cal y del agua
12. NOSTALGIAS DEL PREGONERO

© Enrique Alcalá Ortiz



Pregonero, pregonero,

adorno de pueblos viejos.

¡Qué lejos estás! ¡Qué lejos!

Te recuerdo. Más te quiero.

 

Por las empinadas cuestas,

con aquel feo sombrero,

caminaba con los trinos

de verde loro parlero.

Ya vibraba en voz de plata

en las calles de mi pueblo,

la musiquilla de gala

del enjuto pregonero.

Los chiquillos en bandadas,

-¡a ver quién llega primero!­-

te formábamos la corte,

tu auditorio, pregonero.

 

«Que se ha perdido una rosa

del ojal de un caballero

y el que logre encontrarla

se premiará con dinero.

Que se ha perdido un clavel,

-de una niña amor eterno-

­y el que logre dar con él,

le dará agradecimiento.

Que no se ha perdido nada,

sino un pedazo de cielo

que se cayó de las nubes

y está oculto en el suelo».

 

Los chiquillos, en volandas,

-las noticias del momento­

llevábamos en las caras

las buenas del pregonero.