POESÍA DE ENRIQUE ALCALÁ ORTIZ - Casi una nube
04. CASI UNA NUBE (IV)
Poemas: 16. Multicolor. 17. Fetiche. 18. Sí. 19. Tú y yo. 20. Me pierdo en ti.

© Enrique Alcalá Ortiz



 16. MULTICOLOR

 

Verde, rojo, amarillo,

naranja, azul, limón.

Sobre el sabor de tus labios,

el fuego de mi pasión.

 

Negro, blanco, violeta,

morado, gris, marrón.

En el iris de tus ojos

el arco de nuestra unión.

 

17. FETICHE

 

Fetiche de mi paganismo.

Te hice diosa, y eras...

tan sólo humana.

 

Humanidad divinizada

o divinizada humanidad,

no parecías mujer

y eras eso solamente.

 

Vibraba tu voz de seda.

Su eco pegadizo unía

mi cuerpo con el firmamento

de tu mirada ausente.

 

Amuleto de mi vida.

De mis sugestiones, altar;

te hice diosa, y eras...

sólo mujer fetiche.

 

  

18. SÍ

 

Ufana,

alegre, contenta y satisfecha,

con la sonrisa

sobre los labios

mirabas tú

aquel día,

cuando te confesé

todas mis inquietudes

y zozobras amorosas.

 

Mi pensamiento volaba

por el infinito

hasta que llegó

la nota grave de un .

 

Viviendo  realidad,

mi fantasía

se disipó.

 

19. TÚ Y YO

 

Tú y yo.

Paseábamos, aquel día

junto a la Fuente del Rey Neptuno.

¿Te acuerdas?

El dios de las claras aguas.

 

¿Qué decía tu lengua?

y la mía, ¿qué decía?

No, no decían nada,

hablaban nuestros ojos

un lenguaje de afecto...

 

Tú eras yo,

y yo era tú,

y los dos uno solo

pues uno, no más,

era nuestro deseo.

 

Y así mutuamente esclavos

el uno del otro,

los dos dueños y señores.

 

¿Qué más puede desear

un hombre aquí en la tierra,

que tener un esclavo:

su misma persona;

y poseer una reina,

que es ella,

que hace de él su señor?

 

 

20. ME PIERDO EN TI

 

Sufro contigo,

¿no lo sabes?

Y al sonar la campana

en la tarde, yo te quiero,

¿lo sabías?

 

Del mañana yo haré

hoy un ramo

de ilusiones florecidas,

que presuroso

correré a ofrecerte

y ponerlas en el altar

de tu rósea hermosura.

 

Después, tú olerás

su fresco aroma.

Y prendida en tu olfato

mi ilusión se transformara

en ti misma.

Entonces,

yo...me perderé.