La Villa Turística de Priego

La fórmula mixta público-privada para la gestión de las nueve villas turísticas de Andalucía ha fracasado. Aunque no están los tiempos para que la administración asuma empresas en quiebra, parece que la decisión de compra acordada ayer por la Junta de Andalucía era la única solución posible. Otra cosa hubiera terminado en pérdidas para la propia Junta, que tenía el 50% del capital --ya que el gestor privado, Hotelux, está en concurso de acreedores--, y en el cierre de estas instalaciones situadas en enclaves (Cazorla, Grazalema...) de gran belleza y potencial para el turismo rural. La Junta asignará a un ente propio la gestión de la Red de Villas Turísticas, lo que puede suponer la salvación para la de Priego, ubicada junto a la aldea de Zagrilla, y con unas buenas instalaciones que posiblemente habrá que remozar. Hotelux ya había planteado en diciembre un cierre parcial y un ERTE para los 75 empleados, que ahora recobran la esperanza. Lo importante, con todo, es que se busque un modelo de gestión rentable que no genere pérdidas al erario público.