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04. LOS SUSPIROS SON AIRE Y VAN AL AIRE
Ansias de cariño, hambre de besos, ganas de amor, deseos, deseos, deseos.
© Enrique Alcalá Ortiz
Con el primer cambio de temperatura, una nube de suspiros se cargaría de electricidad positiva que al juntarse con la negativa que ya poseía formó un líquido parecido al agua el cual más tarde caería sobre la tierra y sería causa de la contaminación de todas las fuentes potables. Las mozuelas y mozuelos al beber cada día este líquido saturado de suspiros cogerían la enfermedad del deseo amoroso, enfermedad que se hizo endémica e incurable con brotes de más o menos virulencia según las épocas, los estilos, las modas o las represiones imperantes.
En los períodos de convalecencia se expelerían estertóricos suspiros que ascenderían como el humo para rellenar los espacios vacíos que habían dejado los que antes cayeron sobre la tierra. De esta forma el ciclo sería un círculo cerrado. Un círculo que parecía imperecedero, pero que el tiempo se ha ido encargando de deformarlo encrespando sus líneas.
Los hombres somos una caja de deseos. Y dentro de estos deseos, los amorosos son los hermanos mayores de esta familia numerosa e inmortal. Los deseos amorosos de nuestras coplas son la muestra de un hecho cultural que hacía del instinto amoroso casi un pecado, y por tanto condenable. Esta represión dio como resultado el enorme número de coplas que muestran esos ardores naturales que una moral inconcebible puso dique y murallas. Pero, a pesar de todo esto, los deseos de este apartado no se nos muestran revolucionarios, soeces, vulgares o impúdicos, sino que todos se mantienen en esa línea de comportamiento de una moral católica que no permite excesos públicos. Asimismo confirman la sentencia: "dime de qué hablas y te diré de lo que careces". El estómago que tiene siempre comida a mano no se acuerda tanto de ella como el que apenas se llena. Ansia de cariño, hambre de besos, ganas de amor, deseos, deseos, deseos.
1. Deseos de amor
1676
Acabasme de decir
que me quede o que me vaya,
porque me estoy deshaciendo
como la sal en el agua.
1677
Aceite le pido al mar
y agua clara a los olivos,
que me ha puesto tu querer
que no sé lo que me digo.
1678
A la mar fui por naranjas
cosa que la mar no tiene,
metí la mano en el agua,
la esperanza me mantiene.
1679
A la una entré en tu calle,
mi vida, y ya son las dos.
Dile a tu perro que calle,
consejaremos los dos.
1680
Al pasar por tu ventana
mi caballo se paró:
el animal comprendía
que nos queríamos los dos.
1681
A mí me gusta moler
en molino que no muele;
a mí me gusta querer
aquél que a mí no me quiere.
1682
Amor con amor se paga,
un refrán lo afirma así;
ahora que me has olvidado
más me acuerdo yo de ti.
1683
Amor mío, si tú tienes
los ojos puestos en mí,
seré tuya si lo quieres
y no me quitan vivir.
1684
Anoche tuve un ensueño
que ojalá fuera verdad:
que te estaba desatando
la cinta del delantal.
1685
Arrímate a mi querer,
que mi querer te da honra:
que el que se arrima a buen árbol
le cobija buena sombra.
1686
Asómate a la ventana
cara de limón florío,
y dale las buenas noches
a tu amante que ha venlo.
1687
Aunque te lleven más lejos
que hojarascas tiene un monte,
he de salir a buscarte
con la estrellita del norte.
1688
Aunque te lleven más lejos
que hojas tiene un olivo,
por muy lejos que te lleven
he de casarme contigo.
1689
Aunque te salgan más novios
que plumas tiene un mochuelo,
no te ha de querer ninguno
como el nieto de mi abuelo.
1690
Aunque tú no me hayas visto,
no tengas pena morena,
que a la corta que a la larga
tú serás mi compañera.
1691
Ayer tarde estuve haciendo
castillitos en la arena
y al mismo tiempo pensando
en tu carita morena.
1692
Campanillas de oro y plata
le puse a mi pensamiento
para cuando en ti pensara
no se lo llevara el viento.
1693
Capullito, capullito,
ya te vas volviendo rosa;
ya va llegando la hora
que te diga alguna cosa.
1694
Como el amor tiene alas
y se va pa donde quiere,
mi amor se ha parado en ti
y retirarse no puede.
1695
¿Cómo quieres que a la mar
se le seque la corriente?;
¿cómo quieres que yo olvide,
amor, que he querido siempre?
1696
¿Cómo quieres que te quiera,
si tú no me das calor?:
que si tú calor me dieras,
verías quererte yo.
1697
Con tinta negra te escribo
porque es muy negra mi suerte,
qué lejos estás de mí,
qué ganas tengo de verte.
1698
Copos de nieve en tu cara,
parecen que van cayendo;
cuando más te voy mirando
mejor me vas pareciendo.
1699
Cuando el manto de la nieve
por las noches te cobija
yo quisiera aprisionar
tu boquita con la mía.
1700
¿Cuándo querrá Dios del cielo
que la Pascua caiga en viernes,
la lunita en tu tejao
y yo en la cama en que duermes?
1701
Cuando te veo beber
quisiera volverme copa,
para llegar a tus labios
y darte un beso en la boca.
1702
Cuando veas las estrellas
ve contando dos a dos,
y, si crees que son muchas,
mucho más te quiero yo.
1703
Cuánto daría por ser
tu cantarito de barro,
pa ir por agua a la fuente
sujetito de tu brazo.
1704
Cuartillo y medio de sangre
me sacan porque te olvide,
aunque me quede sin gota,
olvidarte es imposible.
1705
De esta fuente yo bebiera
aunque no tuviera sed,
si supiera que han bebido
los labios de mi querer.
Variante: ?ojalá sea verdad?.
Como variante: anteanoche.
?Cuatro lebrillos de sangre?, como variante.
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